El síndrome de Marfan es una enfermedad rara del tejido conectivo, que afecta a distintas estructuras, incluyendo el esqueleto, pulmones, ojos, corazón y vasos sanguíneos. Se caracteriza por un aumento inusual de la longitud de los miembros. Se cree que lo sufren una de cada 10.000 personas y, diferentemente a otros problemas genéticos, no afecta negativamente a la inteligencia sino que, al contrario, los pacientes suelen ser brillantes y carismáticos. Aunque no es posible hacer un diagnóstico certero al respecto, por los síntomas externos y descripciones de la época se cree que sufrieron este síndrome o, al menos, presentaban molestias y morfologías marfánicas personajes tan destacados como Abraham Lincoln, Rachmaninoff, María I de Escocia, Charles Maurice de Talleyrand, Niccolò Paganini o el faraón Akenatón. También se sabe en la actualidad que este síndrome ha hecho acto de presencia en personalidades como Flo Hyman, Jonathan Larson, Robert Johnson, Vincent Schiavelli, Javier Botet y aunque dado el enigma que se cierra al personaje es difícil conocer la realidad, pero también se ha sugerido que Osama bin Laden pudiera padecer esta patología.
Tabla de contenidos
1 Causas
2 Herencia
Causas
Se trata de una enfermedad hereditaria autosómica dominante que se asocia al gen FBN1 del cromosoma 15. El FBN1 codifica una proteína llamada fibrilina, que es esencial para la formación de fibras elásticas del tejido conectivo. Sin el soporte estructural de las fibras elásticas, muchos tejidos presentan una debilidad que puede conducir a distintas consecuencias (p.e. rotura de paredes arteriales, formación de aneurismas).
Esta enfermedad es causada por un defecto (mutación) en el gen que determina la estructura de la fibrilina, una proteína que es parte importante del tejido conectivo. Se nace con el Síndrome de Marfan, aunque puede ser que no se le diagnostique hasta más tarde. Aún cuando todas las personas con el Síndrome de Marfan tienen un defecto en el mismo gen, la mutación es diferente en cada familia; no todas las personas experimentan las mismas manifestaciones clínicas o con la misma severidad. Esto se conoce como expresión variable, lo que implica que el gen defectuoso se manifiesta de manera diferente en las personas afectadas. Los científicos aún no logran entender por qué ocurre esta expresión variable en las personas con Marfan. Por ejemplo, a Niccolò Paganini le medían las manos abiertas 45 cm cada una.
Herencia
El gen defectuoso puede ser heredado; los hijos de una persona que tiene el Síndrome de Marfan tienen un 50 por ciento de probabilidad de heredar la enfermedad. En ocasiones, se produce un nuevo gen defectuoso durante la formación del espermatozoide u óvulo (mutación), pero dos padres que no están afectados tienen una probabilidad de uno en 10.000 de tener un niño con el Síndrome de Marfan. Se estima que el 25 por ciento de los casos de Marfan se deben a una mutación espontánea al momento de la concepción.
La enfermedad de Paget ósea es un proceso crónico caracterizado por áreas focales de reabsorción ósea acompañadas de un aumento en la actividad osteoblástica. Produce dolor, deformidad y complicaciones como fracturas, deformidades y atrapamientos nerviosos. Responde al patrón descriptivo de Osteítis Deformante, como se denominó clásicamente. 1,2
Es una enfermedad poco frecuente antes de los 55 años (muy rara antes de los 40 años) con una frecuencia máxima hacia la sexta década, aumenta su prevalencia con la edad y es ligeramente más común en hombres que mujeres 1,8/1.2
Su presentación clínica es muy variable. No es infrecuente el diagnóstico de casos asintomáticos por un aumento de la fosfatasa alcalina o como hallazgo casual en una radiografía ósea. Otras formas de presentación son: dolor, artropatía, deformidad, fracturas, síntomas neurológicos por atrapamiento e incluso una complicación tumoral como el osteosarcoma 1,2.
La transformación maligna del hueso pagético ocurre en menos de 1% de los casos 2 . Se manifiesta como dolor intenso que no responde al tratamiento supresor, suele aparecer una masa de partes blandas adyacente y en la radiografía se observa un patrón infiltrativo agresivo con destrucción de la cortical 8.
Los huesos que con más frecuencia se afectan son: pelvis, columna vertebral, cráneo, fémur y tibia. Se puede afectar uno o más estructuras óseas. El dolor es un síntoma que ocurre en una minoría de pacientes. Suele ser constante (diurno y nocturno), pobremente localizado, y quemante. Si es localizado puede corresponder a microfracturas en un área lítica 2,3.
La complicación neurológica más frecuente se relaciona con la afectación del hueso temporal a nivel intrapetroso, produciendo sordera, de conducción (por afectación de la cadena de huesecillos), neurosensorial (por compresión del nervio auditivo), o mixta. Puede producir vértigo, compresión medular y síndromes de compresión radicular periférica 2.
El diagnóstico se realiza por radiografía simple. La imagen suele ser característica en la mayoría de los casos, aunque en ocasiones hay que realizar el diagnóstico diferencial con lesiones metastásicas líticas o escleróticas 2.
Se recomienda que el diagnóstico esté confirmado al menos por la afectación de un hueso mediante radiografía simple [C] 4.
La gammagrafía es útil para conocer la extensión del proceso [C] 2, 4 y para el estudio de probables complicaciones neurológicas por afectación de huesos de la base del cráneo, columna vertebral o huesos largos 2. Es más sensible que la radiografía simple para identificar los huesos afectados (un estudio ha demostrado que detecta un 50% más de lesiones que la radiografía [C] 4.
La tomografía axial computarizada se utiliza para diagnosticar estenosis de canal vertebral, afectación craneal o complicaciones neurológicas 2.
Un 85% de los pacientes sin tratamiento presentan elevación de los niveles plasmáticos de fosfatasa alcalina. Puede estar normal en afectación de un solo hueso o de huesos pequeños [C].
La fosfatasa alcalina total es el marcador más sensible [B]. En paciente sin elevación de la fosfatasa alcalina total [B], así como en pacientes con enfermedad hepática se recomienda la determinación de la fracción ósea como marcador de remodelado. Existe una correlación entre la extensión de la afectación y los niveles de fosfatasa alcalina [B]. Para el seguimiento ésta es el indicador de actividad más utilizado 4.
Texto extraido sobre enfermedad ósea de paget de: http://www.fisterra.com/guias2/paget.asp
T score menor a -1,0 y mayor a -2,5
Como la osteoporosis, ocurre más frecuentemente en mujeres postmenopáusicas, como resultado de pérdida de estrógeno. Y puede exacerbarse por factores del estilo de vida, tales como falta de ejercicios, exceso de consumo de alcohol, fumar, prolongado uso de medicación glucocorticoide, como la prescripta para el asma.
La enfermedad puede presentarse en mujeres jóvenes que son atletas. Está asociada con el síndrome de tríada de atleta femenina siendo uno de los tres componentes, los otros dos son amenorrea y desórdenes alimenticios. Las atletas femeninas tienden a un peso corporal bajo, bajo porcentaje de grasas, y mayor incidencia de asma que personas menos activas. Los niveles de estrógenos bajos (que se almacenan en la zona grasa) y/o el uso de corteosteroides para el asma pueden significativamente debilitar los huesos en un largo periodo de tiempo. Los corredores de distancia en particular, al no consumir productos lácteos al entrenar, resultando en baja absorción de calcio frente a otros grupos.
Es también un signo de normal envejecimiento, en contraste con la osteoporosis que se presenta en vejez patológica.
La osteoporosis es una enfermedad en la cual disminuye la cantidad de minerales en el hueso, perdiendo fuerza la parte de hueso trabecular y reduciéndose la zona cortical por un defecto en la absorción del calcio, lo que los vuelve quebradizos y susceptibles de fracturas y de microfracturas.
La densidad mineral de los huesos se establece mediante la densitometría osea.
Esta afección se produce sobre todo en mujeres, amenorreicas o post-menopaúsicas debido a la disminución del número de estrógenos y otras carencias hormonales . La deficiencia de calcio y vitamina D por malnutrición, así como el consumo de tabaco, alcohol, cafeína y la vida sedentaria incrementan el riesgo de padecer osteoporosis; la posibilidad de aparición en bulimaréxicas es elevada.
La práctica de ejercicio y un aporte extra de calcio antes de la menopausia favorecen el mantenimiento óseo. En ciertos casos, se pueden administrar parches hormonales, aunque siempre bajo estricto control ginecológico.
Causas
Los huesos están sometidos a un remodelado contínuo mediante procesos de formación y reabsorción; también sirven como reservorio de calcio del organismo. A partir de los 35 años se inicia la pérdida de pequeñas cantidades de hueso. Múltiples enfermedades o hábitos de vida pueden incrementar la pérdida de hueso ocasionando osteoporosis a una edad más precoz. Algunas mujeres están, también, predispuestas a la osteoporosis por una baja masa ósea en la edad adulta.
La menopausia es la principal causa de osteoporosis en las mujeres, debido a la disminución de los niveles de estrógenos. La pérdida de estrógenos por la menopausia fisiológica o por la extirpación quirúrgica de los ovarios, ocasiona una rápida pérdida de hueso. Las mujeres, especialmente las caucásicas y asiáticas, tienen una menor masa ósea que los hombres. La pérdida de hueso ocasiona una menor resistencia del mismo, que conduce fácilmente a fracturas de la muñeca, columna y la cadera.
Numerosos médicos concuerdan en que el problema no se haya tanto en la cantidad de calcio ingerido como en la cantidad de calcio que se pierde a través de la orina por una dieta inadecuada. Los refrescos compuestos de ácido fosfórico y las dietas altas en proteínas -sobre todo de origen animal-, crean enormes cantidades de ácido úrico como producto metabólico y producen pérdida de calcio desde los huesos para neutralizar esta reacción.
Por eso, en la prevención de la osteoporosis no solo es importante una dieta alta en calcio y en vitamina D, sino baja en productos que eliminen calcio.
La osteítis deformante o Enfermedad de Paget es una enfermedad inflamatoria del tejido óseo no metabólica de causa desconocida aunque se piensa que puede representar una neoplasia benigna de las células formadoras del hueso. También se ha sugerido una causa viral que produce un exceso de destrucción y restauración ósea a la que se asocian deformidades porque la restauración se realiza de forma desordenada. Más del 3% de las personas mayores de 50 años presentan lesiones aisladas, aunque la enfermedad clínicamente importante es mucho menos frecuente. La posibilidad de que la enfermedad se presente varias veces en la misma familia es alta.
Tabla de contenidos
1 Síntomas
2 Diagnóstico
Síntomas
La osteítis deformante es muchas veces moderada y asintomática. Por lo general el primer síntoma es el dolor profundo del hueso. Los huesos se vuelven blandos, lo que permite a las tibias arquearse y se producen cifosis y fracturas frecuentes con traumatismos moderados. El aumento de la irrigación sanguínea (vascularización) en los huesos afectados causa un aumento de la temperatura del miembro.
La enfermedad produce fracturas frecuentes y se poducen por traumatismos mínimos.
Diagnóstico
Los exámenes de laboratorio muestran que la fosfatasa alcalina está muy elevada al igual que la hidroxiprolina y el calcio en la orina.
Factores ambientales
Factores genéticos
La presentación del síndrome clínico varía considerablemente según los pacientes. La forma más frecuente es el inicio insidioso, progresivo, con debilidad muscular indolora durante 3 a 6 meses previo a la primera consulta médica. Algunos pacientes especialmente los niños y adultos jóvenes con dermatomiositis suelen tener un inicio agudo con mialgias y debilidad de rápida progresión en semanas acompañado de fiebre y fatiga generalizada. Un bajo porcentaje de pacientes se queja solamente de mialgias. El rash de la dermatomiositis en pocos pacientes puede preceder a la miositis. (Esta presentación es poco frecuente).
Manifestaciones clínicas:
Constitucionales
Cutáneas
Muscular
Articulares
Respiratorias
Cardíacas
Gastrointestinales
Renal
Asociación con neoplasias
Grados de debilidad muscular
Criterios diagnósticos de Bohan y Peter (es la más utilizada por su aplicación práctica).
De acuerdo a la cantidad de criterios que presentan los pacientes se habla de:PM definida (4); probable (3) y posible (2).DM definida (3ó4), probable (2) y posible (1) todos deben tener el compromiso cutáneo.
Exámenes complementarios
Laboratorio: Pueden tener anemia leve a moderada de las enfermedades crónicas. La eritrosedimentación puede ser normal o estar levemente aumentada (30-50 mm/h) en el 50% de los pacientes. Las enzimas musculares se elevan por la injuria muscular, detectan actividad inflamatoria aguda. La CPK se puede elevar semanas o meses antes de la evidencia clínica de debilidad muscular y cae a niveles normal o casi normal antes de la mejoría clínica o remisión. Puede tener valores normales en PM/DM en tres situaciones:a) Presencia sérica de un inhibidor de la CPK.b) Enfermedad muscular crónica en etapa final con atrofia.c) Inicio reciente de la enfermedad.Otras enzimas que están elevadas en las etapas activas de la enfermedad son la LDH, aldolasa, GOT y GTP y suelen evolucionar en forma similar a la CPK en las remisiones o exacerbaciones.
Serología: El anticuerpo antinuclear (FAN) puede ser positivo en un 80% de los pacientes, tienen anticuerpos antinucleares y/o contra antígenos citoplasmáticos. Los títulos habitualmente son moderados a bajos y pueden ser altos cuando se asocia a otras enfermedades del colágeno, especialmente el lupus eritematoso sistémico o la enfermedad mixta del tejido conectivo (EMTC).Los anticuerpos específicos de unos subgrupos de miositis son:Anti-Jo-1: Se encuentra en un 20% de las miositis, es una RNAt sintetasa citoplasmática, da un “síndrome antisintetasas” con una relación 2-3 mujeres/ 1 hombre caracterizado por un inicio agudo con artritis simétrica no erosiva, miositis severa, manos de mecánico, fiebre, enfermedad pulmonar intersticial, fenómeno de Raynaud; genéticamente asociado al HLA Dr3 y Drw 52. Tienen moderada respuesta a los esteroides y una sobrevida de 75% a los 5 años.Anti SRP (anti signal recognition particle): en un anticuerpo anticitoplasmático, se presenta en <5% color="#003300">Electromiograma: Es un test muy sensible pero no específico para evaluar miopatías inflamatorias, los hallazgos típicos incluyen: a) En reposo fibrilación espontánea y ondas (+) en diente de sierra y aumento de la irritabilidad de miofibrillas en el lugar de inserción de la aguja , en el 75% de los pacientes.b) A la estimulación mecánica del músculo o al moverse el electrodo, descargas repetitivas de alta frecuencia (potenciales pseudomiotónicos).c) En la contracción voluntaria se ven potenciales de unidad motora de corta duración y pequeña amplitud con aumento de los potenciales polifásicos en el 90% de los pacientes.
Biopsia muscular: Se encuentran células inflamatorias crónicas en áreas del intersticio y perivascular alrededor de las miofibrillas, presentes en un 80% de los casos. El infiltrado endomisial es de linfocitos, histiocitos, células plasmáticas, eosinófilos y polimorfonucleares. Se observa degeneración , necrosis de las miofibrillas, fagocitosis de células necróticas y regeneración de miofibrillas. En las miositis de larga evolución el tejido conectivo fibrótico reemplaza a las miofibrillas necróticas. Se observa un patrón “en parches” de las lesiones. En un 15-20% de los casos la biopsia no es característica, de ahí la importancia de los demás criterios para llegar al diagnóstico.
Biopsia cutánea: En la DM tempranamente las lesiones revelan atrofia epidérmica, licuefacción y degeneración de las células basales, con infiltrado perivascular de linfocitos e histiocitos en la dermis superior. Hay vasculitis de pequeños vasos con inmunofluorescencia negativo.
Capilaroscopía: Es el patrón ES/DM donde se observa pérdida de los capilares, con agrandamiento de asas capilares, megacapilares y hemorragias cuticulares.
Técnicas de imágenes: Ayudan a seleccionar el sitio de la biopsia muscular.La resonancia nuclear magnética es la mejor técnica para distinguir el músculo de los otros tejidos blandos. Detecta en forma temprana los cambios por la enfermedad y muestra la afectación en parches del tejido muscular. También permite el seguimiento terapéutico de las miositis.
Exámenes pulmonares: Se evalúa el compromiso pulmonar con radiografías de tórax, volúmenes pulmonares, difusión del monóxido de carbono, funcional respiratorio, presiones bucales, tomografía de alta resolución y lavado bronquioloalveolar.
Exámenes cardíacos: Electrocardiograma, ecocardiograma doppler y holter.
Exámenes gastrointestinales: Seriada de bario, manometría esofágica y enema de colon en aquellos pocos pacientes con manifestaciones de superposición con esclerodermia, EMTC, etc.
Diagnósticos diferenciales
1-Causas de debilidad no neuromuscular: Hipotensión, arritmias cardíacas, hipoxia, hipercapnia, hiperventilación, hipoglucemia, insuficiencia cerebrovascular, estados emocionales, ataques de ansiedad, anemia, infección aguda o crónica, malignidad, desnutrición o fallo orgánico sistémico.
Evolución
Factores de mal pronóstico
Causas de muerte
Medidas de apoyo
La policondritis recidivante (PR) es una afección sistémica crónica y recidivante que compromete preferentemente el tejido cartilaginoso de diversos órganos y sistemas produciendo una reacción inflamatoria intensa con necrosis de cartílago y su reparación con un tejido fibrocicatricial.
La piel es un órgano muy importante como marcador de manifestaciones de enfermedades subyacentes. Cuando la PR afecta sólo a órganos internos como el árbol traqueobronquial su diagnóstico es difícil, en cambio cuando afecta la piel, como la de los pabellones auriculares o de la nariz, que tienen estructuras cartilaginosas, el diagnóstico es más sencillo mediante una biopsia cutánea, como en nuestro paciente, quién además tenía dolores articulares y dolor precordial con palpitaciones.
El primer caso reportado en la bibliografía, corresponde a Jaksch-Wartenhorst en 1923; posterior a el, hasta 1963, se publicó aproximadamente 50 casos más.
El cuadro clínico compromete generalmente los cartílagos de las orejas y el globo ocular, con tumefacción y dolor, subsecuentemente se tornan blandos. También con frecuencia se compromete el septum nasal, ocasionando diversos grados de deformidad, Se menciona, asimismo, compromiso de cartílago de árbol traqueobronquial, compromiso aórtico, cardíaco y renal19,20. En el globo ocular se describen inflamación conjuntival, del iris, de la esclera y de tejido uveal pudiendo llevar a la ceguera. El compromiso articular semeja al de la artritis reumatoide, pudiendo ser mutilante. La muerte puede suceder por colapso de la tráquea y de la laringe. Los cambios cutáneos siempre corresponde a los de los pabellones auriculares con tumefacción, eritema y dolor.
Son interesantes las asociaciones de la PR con otras afecciones, tales como el síndrome de Sjögren, el lupus eritematoso5,6, compromiso cardíaco incluyendo miocarditis y bloqueo cardiacol. Además se han reportado asociación con síntomas articulares8, condrosarcoma9, xantomatosis planas normolipidémicas10, vasculitis de Schönlein-Henochi11, manifestaciones oculares12, compromiso del sistema nervioso13, reportan un caso de meningouncefalitis asociada de RP en una mujeres de 70 años18. también con síndrome mielodisplásicos14, con lesión valvular cardíaca y su reemplazo7,15, trombosis venosa y arteriales16,18. La condritis del árbol traqueo bronquial aislado es raro20.
La PR es una afección sistémica crónica y recidivante que afecta al tejido cartilaginoso, de probable etiología autoinmune, que compromete a ambos sexos por igual, presentándose en la juventud o en la edad adulta media de la vida, con probable influencia genéticofamiliar y cuyo mecanismo patogénico no se conoce estrictamente, pero se plantean hallazgos histoquímicos como el decrecimiento en la cantidad de ácido mucopolisacárido en la matriz de cartírlago16. Un cuadro patológico similar sucede en el caso de la hipervitaminosis A experimental, que induce la depleción de la matriz cartilaginosa3. Hermán y col4 sugieren que un componente antigénico de cartílago puede facilitar la perpetuación de la inflamación de este por mecanismos de inmunidad celular También es discutible la presencia de antígeno de histocompatibil¡dad de la clase II, y que la susceptibilidad de la PR está significativamente relacionada con la presencia de HLA-DR421.
El caso que presentamos tiene con lo sustento clínico los hallazgos cutáneos de los pabellones auriculares caracterizados por hinchazón moderada, deformación y enrojecimiento acompañado de dolor persistente, asociado a artralgias, dolor a nivel de esternón y precordial, desde hace dos años. Los hallazgos anatomopatológicos también son significativos, por infiltrado inflamatorio profundo que compromete el tejido cartilaginoso, produciendo necrosis y reacción fibrótica aledaña.
El diagnóstico diferencial, obliga a descartar una celulitis infecciosa, que frecuentemente es unilateral y la presencia de abundantes neufrótilos en el sustrato anatomopitológico descarte fácilmente esta entidad. Las deformaciones bilaterales de los pabellones, pueden estar relacionadas también con entidades como las genodermatosis asociadas a trastornos metabólicos sistémicos, que no era el caso.
Por otro lado no tuvimos la oportunidad de hacer un estudio inmunológico adecuado para demostrar presencia de anticuerpos anticartílago humano por inmunofirlorescencia indirecta17, ni demostrar la presencia del antígeno de histocompatibillidad HLA-DR4.
El tratamiento incluye esterolaes sistémicos solos o asociados a dapsona, a metotrexato o a ambos. El paciente no dio oportunidad para ensayar estos tratamientos. H pronóstico en lo referente a la supervivencia es más favorable de lo que antes se pensaba.